“La Iglesia no quiere, y no debe, ser portavoz; sino que debe ser puente y acompañante en la defensa integral de los derechos de los pueblos y comunidades en la Panamazonía”, afirmó Mauricio López, Secretario Ejecutivo de la Red Eclesial Panamazónica -REPAM, al presentar el informe sobre la situación de los pueblos amazónicos ante la CIDH, que se llevó a cabo el viernes 17 de marzo de 2017 al medio día en Washington.
Nuestra misión como REPAM se sustenta en la certeza de que “la Iglesia no habrá cumplido su misión en la Panamazonía, o habrá fracasado en ella, hasta que los pueblos, sobre todo los pueblos indígenas y campesinos, sean sujetos de su propia historia”, reafirmó López, durante la audiencia pública.
La REPAM ha realizado un serio y sistemático proceso de formación y fortalecimiento de capacidades para líderes locales y agentes de la Iglesia en el territorio, a través de una Escuela para la Promoción, Defensa y Exigibilidad de los Derechos Humanos en la Panamazonía. Proceso avalado por la Pontificia Universidad Católica del Ecuador.
En este proceso han participado 13 territorios de 5 países de la Panamazonía: Bolivia, Brasil, Colombia, Ecuador y Perú, en donde hay situaciones de vulneración de derechos, y donde líderes locales y agentes de la Iglesia, responden con valentía ante estas realidades de manera conjunta.
“Lamentablemente, (La Panamazonía) es un sitio amenazado por diversos intereses externos (gubernamentales, corporativos o de explotación ilegal) que quieren expoliar todo lo que hay en ella para satisfacer intereses particulares, causando enormes estragos en la vida de quienes ahí habitan” ha señalado Mauricio López.
La REPAM, reiteró, continuará trabajando con firmeza en la defensa de los pueblos indígenas y comunidades amazónicas hasta que los Estados amazónicos respeten el derecho a la consulta previa, libre, informada, de buena fe y culturalmente adecuada, garanticen la demarcación de las tierras de los pueblos indígenas y comunidades amazónicas, se implemente reformas legales sobre la tierra y limitación de acceso a la justicia y cese la represión y penalización de los movimientos de defensa de los derechos de las personas que trabajan en zonas rurales.
La Panamazonía es un territorio clave para el futuro de las próximas generaciones por su rol de estabilizador climático, y es el espacio existencial para múltiples pueblos y comunidades donde experimentan su vida, identidad y cultura. Pueblos que cuando permanecen son quienes mejor protegen su biodiversidad por la relación espiritual y de reciprocidad que tienen con nuestra madre tierra.
Esta es la segunda presentación de la REPAM en la CIDH, luego de dos años desde que participaron por primera vez en Audiencia temática como Iglesia en América Latina. Ha sido “Una experiencia profunda y significativa, con voz propia de los actores en el territorio con quienes compartimos vida y misión, siendo ellos los propios actores de la transformación de su realidad” dijo Mauricio López.
Finalmente Pedro Ricardo Barreto Jimeno, Arzobispo de Huancayo (Perú) y Vicepresidente de la Red Eclesial Pan Amazónica – REPAM, al iniciar la presentación ante la CIDH, recalcó «Los gozos y las esperanzas, las tristezas y las angustias de los hombres de nuestro tiempo, sobre todo de los pobres y de cuantos sufren, son a la vez gozos y esperanzas, tristezas y angustias de los discípulos de Cristo. Nada hay verdaderamente humano que no encuentre eco en su corazón» (Vaticano II; GS, 1).