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  • Ángel Morillo

Gianni Beretta: Haciendo la película sobre Romero sucedieron milagros


El Desagravio es el nombre el cual los cineastas Gianni Beretta (Italia) y Patrik Soergel (Suiza), con auspicio de la Televisión Suiza, han dado al último documental sobre Monseñor Oscar Arnulfo Romero, quien es el primer caso de mártir católico in odium fidei ("por odio a la fe") cuyo atormentado proceso de canonización tiene posiciones divididas en la misma iglesia y es precisamente en este documental donde se muestran claramente, sin ningún tipo de sesgo ni ambages, cada una de las miradas en torno a la figura de este ahora beato.

El título inicial, según cuenta Bereta, a quien tomamos el pulso, en italiano era El Resarcimiento, pero por sugerencia de su amiga la poetisa Claribel Alegría, nicaragüense y ganadora del Premio de Poesía Iberoamericana Reina Sofía edición 2017, decidió colocarle El Desagravio, una palabra según él no tiene una traducción literal al italiano, describiendo grosso modo los sinsabores que incluso luego de su muerte tuvo que pasar la figura de Romero.

Este documental, de 90 minutos, se trabajó por 2 años y medio. La edición original está en casi un 95% está en español y solamente un 5% en italiano. Además de tener una versión más corta para televisión. En efecto, son 30 años los que Beretta vivió en Centroamérica, quien afirma llegar tiempo después del asesinato de Monseñor.

De algún modo el Papa Francisco colaboró en la realización, pues precisamente con su llegada al Vaticano la causa de su canonización se abrió inmediatamente, pero además de esto, su realizador cuenta una anécdota: “Fue noticia internacional en octubre de 2015 cuando van los peregrinos salvadoreños a agradecer al Papa Francisco por la beatificación, él en ese encuentro les dice cosas de manera privada señalando que el martirio de Monseñor Romero no terminó con su muerte, sino que fue calumniado, difamado y ensuciado por parte incluso de hermanos suyos sacerdotes. Entonces él dio instrucción a sus colaboradores que nos diera las imágenes la filmación de esto que dijo, cosa muy inusual, pues quien me lo dio me dijo que lo que aquí se filma de su Santidad son privadas y jamás las publicamos y nos dio eso para la película”.

¿Cómo surge esta iniciativa?

“La idea surge luego del nombramiento del Cardenal Jorge Mario Bergoglio como nuevo Papa y este invita al postulador del Vaticano que saquen de la gaveta, lo digo con mis palabras, la causa de canonización de Monseñor Romero, y cuando yo veo eso en las noticias, yo digo en italiano este es el resarcimiento porque en italiano esta palabra tiene un sentido de resarcimiento moral. Lo propongo a la televisión suiza, un poco fuera de la línea editorial un tema así que nada tiene que ver con su país, pero lo aprueban”.

¿Cómo fue el proceso de producción?

“En 30 años que llevo en Centroamérica, yo vivía en Managua, pero en San Salvador estaba a cada rato. Gracias a colegas, medios, conocía donde exactamente encontrar imágenes de archivo, pero tuvimos una gran suerte pues hubo un documental que la televisión suiza alemana hizo en 1979 estando en vida Romero y entonces por ser de la misma casa matriz no hubo inconveniente para que nos dieran las imágenes de apoyo con derechos de difusión y en alta calidad de aquel entonces, esto ayudó mucho”.

¿Cómo ha estado hasta el momento la receptividad de este documental?

“Ha tenido una gran acogida. Debo decir que este documental pasó por varios exámenes. La persona que me interesaba saber su opinión era uno de sus protagonistas, el padre Jon Sobrino, pues él es una persona sumamente capaz, vivió todo aquello, fue muy cercano a Monseñor y, sobre todo, muy severo sobre las cosas. Él me dijo estoy encantado, de hecho lo presentó en la UCA (Universidad Centroamericana José Simeón Cañas) ahí fue el estreno en Mayo de 2016”.

¿Qué planes tiene para proyectarlo en las televisoras, plataformas multimedia como Netflix, salas de cine?

“Ya ese es un asunto inmanente a la oficina de promoción de la televisión suizo-italiana que lo tiene que hacer, pero con los distribuidores es un asunto que no conozco muy bien, no es lo mío. Pero sí, donde se quiera presentar este trabajo, que me inviten, yo estoy a plena disposición, pues esto se hizo para ser visto.

¿Desde hace cuánto se dedica al mundo del cine y la producción audiovisual?

“Yo era obrero metalúrgico en Italia y quería ver cómo era una revolución y me fui a Nicaragua de entonces unos seis meses. En esos inicios de los 80 era estar en el momento y lugar más aptos para el periodismo italiano y es de eso modo cómo me inicié a patadas en este oficio como corresponsal para un medio italiano, primero en prensa escrita y radial. A finales de los 90 la televisión suiza me busca por acontecimientos diversos surgidos en Centroamérica y aprendí de la mano de directores el oficio de la producción audiovisual de documentales largos”.

¿Cuántos documentales tiene hasta la fecha?

“De documentales con más de 50 minutos llevo realizados como unos 15. Por ejemplo, en Guatemala realicé dos, uno sobre un suizo italiano que entró en la guerrilla en aquel entonces; luego realicé otro también de un suizo italiano que le vendía cazabombarderos al dictador Ríos Montt cuando hubo la matanza de los mayas a inicios de los 80”.

¿Podríamos afirmar que con estas temáticas que pone de ejemplo es usted un periodista subversivo?

“Bueno, subversivo, pero también hice del que estaba al otro lado de la barricada, pero es más un asunto de ir donde hay historias importantes sean de izquierda o derecha, tenemos que hacerlo y con el mayor compromiso y ética profesional”.

¿Es usted creyente?

“Patrik y yo no somos creyentes, pero no somos ateos. Me explico, nadie puede decir que Dios existe, pero tampoco que no existe”.

Pero haciendo la película sobre Romero sucedieron milagros…

Sucedieron milagros. Es más sucedieron cosas que no tienen explicación y que los creyentes las llaman milagros, por ahí va la cosa. Yo puedo decir que no soy creyente pero en Monseñor Romero y el Papa Francisco sí creo.

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