Durante el Conversatorio RIIAL sobre Evangelización y Twitter realizado el 18 y 19 de enero en el que participaron cerca de un centenar de personas de países Latinoamericanos y de España, una de las preguntas que se ha discutido en los foros ha sido sobre el uso de Twitter por parte de los sacerdotes y obispos, especialmente: cómo animarles al uso de estas nuevas formas de comunicar o brindarles espacios de formación.
Creemos que no haya recetas definitivas para responder a estas preguntas que continúan abiertas, sin embargo podemos ofrecer algunos criterios que recientemente el arzobispo Jorge Patrón Wong, secretario para los Seminarios de la Congregación para el Clero, expresó en noviembre 2014 durante una entrevista realizada por el Centro Televisivo Vaticano.
Internet y Redes Sociales en los seminarios
El aprovechamiento del internet y las redes sociales en la formación de los seminaristas hacia el tercer milenio es una realidad, ya no solamente una hipótesis.
“Hoy los jóvenes han nacido digitales, y nosotros, los formadores, debemos aprender a comunicarnos en forma veloz y breve”, comenta monseñor Jorge Carlos Patrón Wong, de nacionalidad mexicana.
En la actualidad, en su formación, los futuros sacerdotes deben hablar este mismo idioma. Deben estar a la altura de los tiempos. El verdadero reto no es cómo usar las redes sociales sino cómo estar en las redes sociales testimoniando el Evangelio. De esto está convencido el secretario para los Seminarios de la Congregación para el Clero, quien dedica alrededor de 45 minutos al día para comunicarse a través de las redes sociales. Él considera, como el papa Francisco, que no se puede comprender una vida cristiana y una relación con Dios sin la misión de la comunicación.
Mons. Jorge Patrón Wong explica: “Como el papa Francisco ha dicho, la espiritualidad es como una respiración: por una parte, la inspiración que es la presencia de Dios, la cual se da a través de nuestra oración, nuestra espiritualidad, nuestra cercanía con la Eucaristía. Y luego se hace la expiración, que ya es nuestra relación con los demás. Los seminaristas de hoy, los formadores de hoy, estamos llamados a comunicarnos también por estas redes maravillosas. Las redes sociales y los medios de comunicación se convierten para las nuevas generaciones no solamente en un medio de diversión sino en un real medio de comunicación. Como un hábitat natural”.
Los sacerdotes tienen un gran desafío explica Mons. Patrón, lo hace con estas palabras: “Hoy los jóvenes que llegan a nuestros seminarios han nacido en este mundo digital y somos nosotros, los formadores, los que tenemos que aprender a comunicarnos a través de estas redes. Y ésta es una gran ventaja. El gran reto es que nosotros, obispos, sacerdote y formadores, que no nacimos en esta era digital, las aprendamos a utilizar y vivir con estas nuevas relaciones con un nuevo mundo y con unas nuevas generaciones, de tal manera que los contenidos de valores del Evangelio puedan ser transmitidos a los jóvenes a través de los medios que los jóvenes de hoy saben manejar. Y también esto nos lleva a los adultos a aprender de ellos —los jóvenes— a compartir experiencias personales y comunitarias de manera breve, como en cápsulas de contenido”.
“No solamente se comunican cosas bellas, agradables, placenteras sino también aquéllas que son dolorosas. El seminarista y el sacerdote tiene que aprender, a través de los medios de comunicación, a tener una experiencia de encuentro con sus hermanos, porque son maneras muy directas de comunicarse”, concluye monseñor Patrón Wong.